lunes, 10 de diciembre de 2012

TRICKS MIND


SEAWS VIII

"Me rallo como el queso sin poder darte un beso, mecanizando las acciones me generas sensaciones, desconectas mis neuronas, pienso, repienso, lo rumio y me lo trago, para sacarte de mi mente necesito un puto mago, serpiente, comí de tu manzana, bebí de tu elixir, mi cuerpo se arrepiente, te deseo un buen vivir."

La singularidad de los días no tiene sentido cuando haces lo mismo una y otra vez. Al interiorizar las acciones las realizas sin esfuerzo, como conducir. ¿Es eso bueno? Depende de lo que tengas en la cabeza. El objetivo lejano tiende a difuminarse en las banalidades cotidianas y deja volar la imaginación otorgando libertad a los pensamientos: nuestro presente es vacío, el futuro incierto y el pasado entra sin llamar. Una realidad descafeinada, penitencia antes del goce. Shambala vital.

¡Qué tal estáis gentes del mundo!

El domingo introdujimos una nueva experiencia a nuestra rutina campera. Tras la yekinada (recogida del calabacín) Denny The Boss nos miró: *¿Queréis venir con nosotros al Templo? Uff que marrón, nuestra cara de duda aceptó la oferta cuando el hombre continuó: *Si, venid, comida india gratis. Ok, pues vamos. Ok, poneros algo presentable.


 A la hora convenida estábamos en su casa, íbamos a subir al coche y la mujer, engalanada, dijo que no, que primero la llevara a ella y luego nos recogiese, que fuésemos andando. No son hindúes, son Sikhistas, una religión independiente creada por el Gurú Nanak hacia el año 1475 y difundida a través de “los 10 Gurús”. Creen en un único Dios, su propósito vital es huir del materialismo y alcanzar el nivel espiritual más elevado, prohibido el pollo y el alcohol. Deben dejarse el pelo y barba crecer, llevar un machete de autodefensa. Y lo hacen. La comunidad Sikh en Shepparton es prominente y allí fuimos a parar. Descalzos, pañuelo en la cabeza y entramos en la planta baja del Templo. Denny nos dirigía, nosotros detrás, únicos europeos, únicos no indios. Nos sentamos espalda en pared y nos empezaron a servir. Serviciales y hospitalarios, como un comedor de mojas pero de indios, picante hasta en el agua.Cada vez que pasaba uno, le dijeses lo que le dijeses, ahí te plantaba lo que llevaba… No se puede dejar nada  en el plato.

Menuda hincada de rodilla
 Estábamos flipando bastante, lo hacen cada miércoles y domingo, comida gratis para todos utilizando para ello el dinero de las donaciones. La mayoría de hombres y ancianos vestidos de blanco, turbante oscuro, machete y barba. *¿Habéis terminado? Seguidme. Inu detrás de Denny y yo cerrando la composición, subimos las escaleras. *¿Vosotros conmigo, ok? ¿Qué coño vamos a hacer? Abrió una puerta, tocó el suelo como si fuese a jugar el partido de su vida y siguió adelante. Una alfombra roja dividía la sala, a la izquierda mujeres, a la derecha hombres, todos sentados en el suelo con las piernas recogidas, el coro repetía un mantra con voz aguda y apoyo de timbales. La alfombra llevaba a un altar techado en el que se encontraba el gurú, viejo de barba blanca, hierático. Todo sucedió muy rápido. Denny llegó al altar, se arrodilló, besó el suelo  y dejó un billete. Se fue a la derecha. Ahí quedó Inu con sus pantalones cortos y camiseta, enfrente del Gurú, no pude reprimir más risa que sonrisa al ver como hincó rodilla, se postró a los pies del hombre, se levantó, hizo reverencia y se desvió a la derecha.¡Enorme! Mi turno. Repetí movimientos, pedí por el viaje y seres queridos y me uní a la sentada. 2 horas de “misa”, con el gurú cantando y tocando una especie de caja-acordeón. Mientras el gurú salía del altar un fiel agitaba un plumero a ritmo de director de orquesta, ahuyentando los malos espíritus del lugar sagrado. La ceremonia acabó con un indio exponiendo en un Power Point los pasos para realizar donativos a través de internet. Muy eclesiástico. 

Pensando que estaba todo acabado, volvimos al comedor y, una vez saciados, comimos un poquito más. Pese a ser elementos extraños no recibimos una atención desmedida. Una bonita experiencia.

Esperando la hornada de trabajadores que llegarán para la temporada, esto es, desde finales de diciembre hasta principios de mayo, se nos han unido dos nuevos chavales, irakíes. 18 y 24 años, ambos casados. Hacen campo por la mañana y reparten pizzas por la tarde. Esta mañana hemos acabado a la vez así que nos han llevado a casa en su Ford blanco que le quieren vender a nuestro vecino cuñado de Denny, Suomi, por 2.000 AU$. El chavalillo flipao, gorra ladeada, piti en boca, reggeaton irakí distorsionando por los altavoces… *Tú me guías. Dale… Derecha, sigue, izquierda, sigue, la siguiente a la derecha, izquierda, es esa casa de allí… El pavo se ha venido arriba y ha entrado derrapando en la casa… a 80 km/h, Wow, pam, el coche directo a la acequia de la indian´s house… Menuda risa nos ha entrado, el otro irakí, que mide 1.62 indignado de cuclillas, gritando jala jalaaaa y nosotros doblaos sin poder disimular. ¿Y este es el coche que le queréis vender? El chavalillo se reía. Ha pasado el de correos conduciendo, *eso me ha pasado a mí dos veces, ¿puedo hacer algo por vosotros? Tranquilo, ya está viniendo un tractor, tx. 

Pocas novedades más. Días duros estos que no son de inicio ni de final.

¡Que disfrutéis mucho del puente de diciembre! 

FORMED FARMERS

SEAWS VII

A los que nos recordáis con cariño y a los que nos habéis olvidado, a los que intuis que se puede y a los que no, a los que nos apoyáis leyendo y a los que lo hacéis pensándonos, a los que nos queréis ver reir y también a los que nos queréis ver sufrir. A los que queráis. 

Familia, amigos, conocidos y enemigos.

Para todos vosotros resumimos nuestros últimos 10 días, primeros 10 de granja en Shepparton, en un remake de algo menos de 7 minutos. Espero que os guste o, por lo menos, os disguste. 

Abrazo overseas. 




ONÍRICO


SEAWS VI


"Uno se defiende cuando dispone de medios suficientes, y ataca cuando dispone de medios más que suficientes." Sun Tzu.

Me sorprendió con las defensas bajas. Denny The Boss entró en la casa, directo al salón donde estaba yo con el pc. *Lucas, ¿cuando queréis mudaros a la otra casa?, en cuanto haya luz y agua nos movemos *y… ¿cuánto queréis pagar? Uff, pregunta inesperada y respuesta automática, gratis, como aquí.*No hombre, algo tenéis que pagar por luz, agua y gas. Pues lo mínimo posible Denny, ¿cuánto suele pagar la gente a la que empleas? *60/70 AU$ por cabeza a la semana… Se me revolvió el estómago, joder eso son mínimo 480 pavos al mes entre los dos. Too much Denny.* Ok, habla con Laki.

Laki es el hijo de Denny. Imponente con su 1.90 de altura y más de 100 kg de peso a los añorados 20 años, su talón de Aquiles es la soberbia. La tarde se hizo dura barajando opciones con Inu. *Luke, hay que negociar fuerte, ni de coña lo que piden. Ya colega pero la posición de fuerza la tienen ellos. Somos trabajadores ilegales, si perdemos este trabajo se nos tambalea el trip y encima es justo que paguemos algo por tener un techo. Toda la tarde comiéndonos la cabeza cortando los putos calabacines, por lo menos hablamos tranquilos rodeados de  “enemigos“ (la familia india estaba en modo defensivo), ya que de español no entienden nada. Laki se puso a cortar con nosotros, dándonos conversación. *¿Tú a que te dedicas en España Lucas?, bueno, estudié derecho y trabajé año y medio en un despacho, como fiscalista, lo dejé en mayo.*¿Y tú Inu? Abogado también, empezando. ¿Y tú que planes tienes Laki? *Me quiero  montar un parking de coches, el día entero a 12$, aquí todos valen 20 el día por lo menos y así me forraré. No creo que se pueda poner un precio tan bajo dude, es competencia desleal y fijo que la ley de aquí lo prohíbe. *Yo soy la ley. Madre mía, este chaval se cree lo máximo.  Inu y yo esperando a que empezase a hablar del tema del alquiler de la casa pero el colega quería saber más. ¿Qué coche llevas? ¿Hay buenas mujeres en España? ¿Qué Dj´s te gustan? Lo comentamos… Mira Laki, si tu nos tratas bien aquí, nosotros te trataremos bien allí. Inu entró: ahora tienes dos casas en España… Pasó la tarde y el chaval no sacó el tema casa. Eso tampoco mola porque el padre ya nos ha soltado que mínimo 60 persona/semana y pasamos de que luego vengan con un ya os lo dije... Qué rallada de noche. Desmotivación. 

Ayer seguíamos molestos desde primera hora. El desvivirnos trabajando bien dejó paso a una visible indiferencia y poco disimulado pasotismo, sin forzar para no ser despedidos.

Rastrillando una de las hileras donde crecerán puerros: Qué asco me da la situación de sartén por el mango que tienen. Poco podemos hacer. Yo creo que el peor de los casos es que nos vayamos a la nueva casa sin luz ni agua. Nos duchamos en el chorro del campo y punto. La putada es la nevera. *Oye Lucas ¿y si nos vamos a Sidney? Unas amigas mías cobraban 20 pavos la hora pegando imanes de un garito por la calle, ilegales también. Buff, otro billete de avión… Melbourne! Claro Ina! Nos vamos a MEL y nos buscamos algo, está empezando la temporada de verano y trabajo nos saldrá. Me motivé. El hándicap es que no tenemos la working visa, pero alguien nos querrá cerca, ¿no? Qué situación más mala. Trabajo físico 10 horas al día, acabas roto y ahora nos quieren clavar por una casa destrozada. Inu como me toquen mucho los huevos voy a la oficina de inmigración, digo que hemos hecho un reportaje sobre como en Australia contratan y explotan ilegales y les hundimos. Tenemos vídeos y fotos. *Eso si acabamos de malas.

Todo el día esperando la conversación con Laki y, como no llegaba, la forcé cuando se cerraba la jornada, cero ganas de incertidumbre. La negociación fue multitudinaria. Inu y yo por un lado y por el otro Laki subido al toro, su novia (que nos apoyaba tímidamente), Denny y su mujer, que es quien en realidad manda. Oye Laki, ¿qué pasa con la casa? *Ah, el alquiler… Verás colega, por lo menos tenéis que pagar los que gastáis, y eso son 60 AU$ semanales, cada uno. A ver Laki, estamos 14 horas al día aquí y dormimos 8, nos duchamos con agua fría y cocinamos, cuando lo hacemos porque llegamos a casa petados, con el hornillo eléctrico que nos dejaste, sin gas. *Ya, pero lo que os digo es lo mínimo. Laki, no tenemos sábanas, ni cerradura, ni utensilios de cocina. ¿Crees de verdad que esa casa vale 480 al mes? –la cara de la novia me daba la razón- Habló la madre una parrafada ininteligible para mí, Laki tradujo. *Hay gente viniendo a la casa y les tenemos que cobrar. Pues les mentimos y decimos que nos cobráis.*Mínimo 40AU$. Inu decía que no. Ya está Laki. Nos venimos a la casa esta sin agua, luz ni gas, pero gratis. *No puede ser, algo tenéis que pagar… ¿Cuánto estáis dispuestos a pagar? Inu y yo habíamos puesto un límite, de hecho llevábamos dos días haciéndolo. Ahí se lo dije: nos quedamos en la casa que estamos ahora, te damos 120 (el límite eran 150) al mes entre los dos y pagamos la gasolina del coche, que nos lo dejáis. Laki tradujo a su familia, Denny se reía incrédulo, a la madre creo que le dimos pena y llegó la respuesta: os mudáis a esta casa, os pongo luz y agua por 100 AU$ al mes. Inu me decía “¿pero entre los dos o cada uno?”, pregúntale… Vale, 100 entre los dos ¿no? *Sí. Estrechamos la mano, trato. De puta madre Luke! Dijo Inu visiblemente contento. Espera Inu, las sonrisas en casa, hazte el abatido pero menuda triunfada casa por dólar y medio al día...

Parminda
Por cierto, me alegro de que os gustase la historia de las noruegas, si llega a pasar de verdad no la hubiera dejado escapar. Fue una fantasía onírica justificable por el aislamiento femenino al que estamos sometidos en la granja de Shepparton, que todavía no me hago ni a la idea de que estoy en Australia, podríamos estar tranquilamente en El Ejido, y la única mujer con la que hemos tenido contacto, aparte de la familia dueña de la farm, es la que veis en imagen, Parminda, gran conversadora y mejor cocinera, pero sexualmente nos atrae lo mismo que una puerta, quizá nosotros a ella también.

Hace 10 días comenzamos SEAWS con el objetivo de realizar un viaje financiado sobre la marcha. De momento hemos generado 960 AU$ cada uno en 8 días trabajados en la farm, el cuerpo endurecido, ahora la carga tiende a ser psicológica. 

El 28 de enero tenemos billete a Bali. 
Estamos en camino.

¡Besos y abrazos a repartir!

TO THE END

SEAWS V

“Puedes sembrar lo que quieras, pero sólo recogerás lo que hayas sembrado”.

Venga que entre semillada y empaquetada tenemos un par de horas off a ver si baja el sol, ya que con los 43 grados de ahora se esconden hasta los lagartos. Los dos últimos días hemos echado 10 horas cada uno de ellos y hoy de momento llevamos seis, con la inercia. En breve nos mudamos de casa, destino una integrada en el campo de trabajo, ya que al patrón no le apetece llevarnos cada día. ¿Gratis? Entonces lo que queráis. Esta mañana se han incorporado dos iraquíes, majetes y jetas, tres horas después su coche desaparecía entre la espesa nube de polvo arenoso de vuelta a casa… eliminados. Dentro del sufrimiento la experiencia es grande, estamos conviviendo con una comunidad india de religión Singh. En un momento he visto a Inu doblando espinazo al mismo tiempo que el que escribe, plantando semillas, notando como dos ojos indios dominaban la escena. ¿El mundo al revés? O al derecho. Que pa eso somos abogados.

Ayer fue un día de contrastes. La dura rutina se endulzó por la tarde. Luky colega yo creo que con estas 9 horas ya estamos bien… Dale Inu, un poquito más, yo también estoy roto, pero vamos a estirar el día a fondo, cuando estemos en Tailandia o en Indo, en una playa espectacular cocktail en mano, recordaremos estos momentos… Media hora después era la señora (jefa en la práctica), la que daba el día por terminado felicitándonos por el aguante. Llegamos a casa y tras una larga ducha helada, como cada día nos sentamos en la mesa con el pc, con el pilotito de batería baja encendido en el brazo. Zumo de naranja y galletas con chocolate. Reggae de fondo. Reconfortante.


 El trino de los pájaros se apagó súbitamente cuando una voz femenina se expandió en nuestra zona. Hi! ¿Someone there? Nos miramos. Estaba claro que no era nativa anglosajona. Salí de la casa y me encontré con tres mujeres, me impactó una nada más establecer contacto visual con ella, ese cuello delicado, aunque las otras dos físicamente también eran atractivas. ¿Y este regalo? Eran mochileras, noruegas, venían haciendo la costa este de Australia desde Brisbane y querían hacer algo de dinero en una farm, sin agobios… Entré a ver a Inu. Oye, no te lo vas a creer pero hay tres rubias en la puerta, 2 super guapas y una que si hubiera venido sola nos pelearíamos… *Qué dices! Si colega, Bera es para mi, si ella quiere… *Quién es Bera? Cuando te presentes lo sabrás. No hubiera hecho falta decirlo porque a Ragna (el otro cañón) le encantó Inu de primeras, lo noté en cómo se le aceleró la respiración después de los dos besos que le plantó el colega cuando ella extendió la mano a modo de saludo. Dejaron las mochilas en el salón y nos fuimos los cinco a casa de Denny, a 50 metros de la nuestra. Boss, they want to work with us. Le cogí el brazo a Bera, check boss, she is strong and though. *ok, ok, tomorrow at 6.00 am. Estaban emocionadas! 

Chicas me gusta vuestra energía pero en 2 horitas de partida mañana a ver que tal. Dude, we come from the viking´s land, dijo Shelby. Bueno habrá que celebrar que tenéis trabajo o qué, dijo Inu. Llamé a Suomi, el vecino que me habla en indio acompañado de gestos, y así le entiendo. Y yo haciéndole gestos de han venido tres ladies, el otro día hicimos compra juntos y te vi que pillaste 24 cervezas, tu mujer no bebe, así que si puedes déjanos 10 y o te las pago ahora o te las compro mañana… No se hasta donde me entendió, pero me soltó 12 botijos de VB tras decirme que su religión no le permite beber ni comer carne, pero que él lo hace. ¡Gracias grande!

Volví y ahí estaba Inu en el “salón” con dos de ellas, la que me despertó internamente estaba en la ducha. Equipo, vamos a ver la puesta de sol desde un punto bonito… Llegamos a una estructura metálica elevada a 5 metros sobre el suelo. Su función era sujetar los gigantes bidones de agua que surten a las casas o el regadío, pero esta estaba sin bidón. Subimos los 5, vista espectacular del sol escondiéndose dirigiéndose a Europa, salpicando el despejado cielo de gamas de colores que iban desde el violeta más calido al naranja más tenue, pasando por toda la tonalidad del rojo, pasión. Después de gozar y conversar sobre temas al azar, nos presentamos. Noté conexión con Bera. ¿Sientes lo mismo que yo? Poco a poco, oscuridad. Chicas, ¿sabíais que las constelaciones visibles desde aquí son diferentes a las que vemos desde Europa? Ahí estaba Inu iluminando con su encanto. Al rato, casi a oscuras, Rajna y Shelby querían volver. Bera se quería quedar si entendí bien las señales, y lo hice porque nos quedamos solos allí. Inu, nos vemos en casa. Con suerte te llevas un trío! Nos reímos. 

¿What is trío? Bera me inquiría sus ojos azules clavados en mi boca. ¿What? Frío, le he dicho que avise que por la noche hace frío, ¿tenéis saco de dormir?… Una semana sin ver a una mujer ni de pasada hace que tu mente vaya más tosca en la conquista, me controlé. Venga, venga, temas sin importancia… Lo que empezó con un cuál ha sido de momento la mejor experiencia del viaje por la east coast terminó con nuestras caras a un impulso de distancia, quizá haber llegado aquí, dijo. Apreté los músculos faciales, me la hubiera comido entera pero le di un suave beso en la mejilla y le susurré en el oído, sujetando su cara con mi mano izquierda, “como seas igual por dentro que por fuera quiero conocerte”. Se apartó rápido y me besó, vamos a la casa, dijo. Dos caminos pasaron por mi mente: ¿no le ha gustado y se va a sobar o le ha gustado tanto que se ha dado cuenta de que prefiere colchón a insectos? Y la respuesta correcta es... 

Todas las puertas de casa estaban cerradas. En el salón Shelby se leía “The old man and the sea”, de Ernst Hemingway, tumbada en un colchón. Y tu amiga? Pregunté, *adivina… Adivino. *Can I sleep with u? Claro Bera. Me puse una sesión perfecta para el momento y a partir de ahí la educación humana transmutó al instinto animal más puro que he tenido en tiempo… Inu tampoco dormía, a tenor de la vibración de la pared que separa nuestras habitas. Impresionante, hace 6 horas plantaba semillas de calabacín y ahora estoy dentro de esta belleza nórdica, movimiento acompasado, sus uñas en mi espalda, ¿has estado alguna vez en noruega? Asentí con la cabeza, ahora, y hace más calor del que pensaba… 


Esta mañana me he despertado a las 5.30 am. Bera ya no estaba, ni Shelby, ni Rajna. La novela de Hemingway seguía en el salón, abierta y subrayada en la página 148.


Volvemos al curro, ahora nos toca packing, por lo menos es bajo techo.

!A fondo minuto a minuto!


POST NO LIES


SEAWS IV

"Cuatro días trabajados en la Farm. Sabíamos que los calabacines no saltaban del huerto a la sección de vegetales, pero no conocíamos el proceso. Ahora, sí. Todo sea por la motivación subyacente a esta paliza diaria, por disfrutar en Asia lo sufrido en Australia. WS."


En 1984, la familia de los Surmukh Singh, estirpe procedente de Jamnagar (India), decidió, tras perder el padre su trabajo en el taller mecánico en el que trabajaba, emigrar al sur de Australia con la esperanza de iniciar una nueva vida. Con ayuda de un préstamo paterno, Denny y su mujer arrendaron unas tierras que posteriormente compraron y, a día de hoy, se han montado en ellas un próspero negocio familiar que permite vivir mejor que dignamente a todos los miembros de su clan. Y es ahí, en sus cultivos, donde echamos las horas que fatigan nuestros cuerpos y alientan nuestros deseos. Lo del primer día fue una prueba de resistencia brutal y disuasoria. 

Cada día a las 6.20 am un claxonazo proveniente del desguazado coche del Boss indica el inicio de una nueva jornada, salimos de la casa que nos comemos el mundo y en 7 minutos llegamos al campo de trabajo. Nos clavamos los guantes de látex y al lío. El denominador común que abre el telón de la actuación diaria es la recogida del calabacín. Un tractor marca el ritmo en cada una de las vueltas, que cubre 8 de las 80 hileras de 200m que componen el cultivo del tema. Joder que mal lo pasamos el primer día con vaqueros y 35 grados en la cara. A partir de ahí chándal, botas impermeables hasta media espinilla y manga larga. A lo que iba, de primeras estaba (vale para los 2) perdidísimo con el asunto calabacín. Un indio que tras 25 años en Australia tiene el mismo inglés que mi latín nos explicó en 15 segundos como se hacía el tema. *You see, ooooh good one, twist and pick. That´s it. Gracias tío. Cada 30 cm una planta, y casi cada una de ellas con 2 o 3 hortalizas listas para recoger. Difíciles de ver por las amplias hojas picantonas que las cubren. El tractor a velocidad suficiente para que no dejes de caminar. 

Miras, localizas, castigas lumbar o isquiotibial, lo coges, giras y con suerte ya es tuyo. Sin suerte lo petas y no sirve. Y te miran mal. 4 hileras para tres personas. Los tienes, los dejas en la cinta transportadora del tractor que los dirige a un barreño enorme lleno de agua. Dos hileras partiéndote el lomo y paras a descargar el barreño a base de llenar y cargar cajas de corcho de 20 kg cada una, depositando los zucchini con cuidado ya que tienes una barba de más de 1 año de crecimiento escrutando tus movimientos. 3 horas despúes, 15 minutos de break. Trabajamos el jefe, su mujer, sus dos hijas, su hijo, que es el único nacido en Australia y nosotros. En los escasos parones, ellas nos ofrecen té indio, galletas y albaricoques, hospitalarios desde sus ancestros. Empezaron con ciertas reservas hacia nosotros que a día de hoy hemos entendido. Dicen que 1 de cada 4 personas que se unen a ellos para trabajar abandona a los dos días. Tras el descanso la actividad a desarrollar no está clara, pero siempre hay algo laborioso que hacer. Recoger y seleccionar habas, rastrillar las malas hierbas de las hileras donde crecen los puerros que dentro de poco recogeremos, cortar y empaquetar el producto.
De momento estamos echando una media de 11 horas en el campo, 9 de ellas trabajadas y sudadas, pagadas. Y así vamos a seguir, si el cuerpo respeta, hasta conseguir descontar todos los gastos acometidos en llegar aquí, y un poquito más. Pretendemos poner de nuestro bolsillo lo mínimo posible en los previstos 4 meses conociendo las maravillas del sureste asiático. Hoy hacemos una semana de viaje y la idea se va plasmando, aunque no contábamos con semejante dureza minuto a minuto. ¿Duro? Duros nosotros, sólo los diamantes cortan diamantes.

5 horas después, qué cara quieres...
Son las 11.30...


En breve vendrán más europeos a su “working holiday” y los primeros se alojarán en la casa que habitamos, el resto en tiendas de campaña por los alrededores. Qué rico llegar a casa, ducha, cenita y peli. Inu marca en la pared los días que llevamos. La ducha helada después de trabajar repone como el mejor de los spas. Cuando estoy en faena dejo de ser Lucas para ser una tarea que tiene que ser realizada. Comemos sano, trabajamos sano y el cuerpo lo agradece a su manera, desintoxicado. “Nunca he sentido un chute de energía tan fuerte como el de tomar algo al venir destrozado y volver al trabajo como nuevo, en casa comes por inercia, aquí lo necesitas y lo notas” (Inu dixit). La parte sucia de mi mente piensa en lo bien que se lo pasan las chicas indias recogiendo calabacines. El dolor físico mantenido expande la resistencia de tus límites. La sensación de una ola en agua caliente. Cara desencajada y recibo un: qué buenas están las habas con jamón eh? Ya ves, y sin habas. Puto Inu lo que nos reímos. El ipod a veces consigue que nos evadamos de la gota de sudor que resbala por cara y nariz. Estar inmerso en terco dolor, mirar al otro, apretar los dientes y seguir con la promesa de lo que vendrá.

 Más dura la batalla, más dulce la victoria.


Buenas noches desde Shepparton, esta es otra cara de la luna. 

READY TO WORK


SEAWS III

Después del shock de pensar que habíamos errado en la decisión de venir a Shepparton, decidimos seguir insistiendo… 

 ...Por lo menos hoy, y si no, ponemos rumbo Queensland para probar suerte allí o Bali un mes de goce y luego España. Señora, a la derecha. La mujer cabeceó en sentido negativo. ¡Dale vieja! Dejando atrás terrenos y más terrenos, palpitamos, here. Giró a la izquierda. 3 coches reventaos, un almacen con tractores, 2 caravanas blancas y vacías y 2 casas rosas. Táctica grito hasta que apareció una pareja de indios. Con gestos entendimos que nos mandaban a la casa de la parcela de al lado. La viejuna harta de los españoles. Daaale. Llegamos a un casoplón donde nos recibieron tres perros ladrando agresivamente, aunque no intimidaban. Salió un Indio muy puro. Piel curtida, arrugas recorrían su cara a lo shar pei, barba blanca y pañuelo en la cabeza… Buscamos trabajo. Se quedó un rato quieto, sin reaccionar, el suficiente para preguntarnos si nos había entendido. *Yes, ok. Venid mañana por la mañana. (¿Cómo? ¿En serio? ¿Ya está?) ¿Podemos dormir aquí? * Yes, yes, en la casa rosa. OK! Y ¿a cuanto se paga la hora? *12AU$... Mejor 16 ¿no? Somos duros, dijo Inu. Hehe. 14. Hecho. ¿A qué hora? A las 7.30 am. Ok. Gracias Denny.

¡Lo ve señora! Conseguido. La mujer estaba contenta por nosotros. Y nosotros con la risa nerviosa y triunfante de joder colega son las 2 pm, no llevamos ni 5 horas en Australia, 2 de ellas en un bus y objetivo cumplido. Me daba tres días para conseguir una farm y ahora tenemos una y casa gratis. ¿Vivirá alguien con nosotros? ¡Que más da! Tenemos Kelly y toca modo trabajo & ahorro. No pain, no gain. Señora, ¡a donde antes! La “casa” estaba abierta, muy descuidada. 4 habitaciones, cocina y baño. Polvo. Reventada. Telarañas. Espera Inu, antes de nada vamos a hacer compra. Señoraaaa, que putada habernos cogido ¿eh? *¿What? Nada, que nos vamos al market. Te pago lo que quieras pero sé justa. Ina se quedó con ella en el parking del centro comercial a ver si le iba a dar a la mujer por irse con el equipaje. Compra de supervivencia basada en pasta y arroz y retorno a casa. Casa. Qué bonito. La taxista pedía 60 y se conformó con 50. 


Tomamos posesión de la casa deshabitada, gemela de la casa de la pareja de indios, Suomi y su “mujer”. El pensamiento al verla de nuevo fue: joder venga que es gratis, lo aguantamos. Luz en cocina y baño. Y ya. Dispusimos las mesas y sillas al gusto creando nuestras zonas. ¡Puta! El USB del canijo nos pide datos que no tenemos ni él tampoco, no wifi. Luke vamos al super, que sin internet aquí va a ser un poco tétrico… Toma las llaves del coche, jaja ¡si no tenemos! A patuna. Me llevé el portátil para probar la tarjeta y candamos nuestras rooms. Por el que dirán. 33 grados en cada rayo de sol filtrado por la castigada capa de ozono australiana caían a peso mientras cubríamos los 7km hasta el centro comercial. 4 coches obviaron nuestra existencia y pulgar arriba, pero el quinto nos recogió a falta de 4km. *What´s going on dudes? Shepparton? Get in. Dos obreros de Bangladesh, de nuestra edad. Personajes. *¿A trabajar al campo? Duro de pelotas, vais a flipar, ¿Dónde os quedáis? conozco un hostal que cuesta 70 pavos la semana. Tenemos casa por la cara no te preocupes. *¿Y eso? Bueno, tened cuidado con las arañas, colega aquí hay una que te pica y te paraliza. Y las serpientes son una cosita también. Llegamos al doble W (CC), y con un “Cheers, have a good one” separamos caminos.

*Chicos, necesitáis un nuevo USB. ¿Y cuánto cuesta? *El más barato son 60, 2GB. Preguntad en el super para algo más económico. Y allí fuimos. El de Virgin son 49 (ese es el que queremos). En la caja, por fuera, venían los datos que nos faltaban… Inu dejó la cámara preparada para hacer la foto y que saliese gratis el tema, distrajo a la dependienta, tras 4 intentos lo teníamos. Gracias, no lo queremos. Metimos los datos y… nada. Nos seguía faltando un puto número.  Vamos que cuando alguien compre el USB no le funcionará. Acabamos comprando el de 60 AU$ y de vuelta a casa. Debía ser una novedad ver a 2 rizos caminando por la carretera porque nos pitaron y gritaron por lo menos desde 5 coches. Cabrones, mejor llevarnos. Andando hasta casa… Oye, no hay WC? no jooodas. Papel y al campo jajaja. Vaya tela estar en el tema y ver a lo lejos una caseta... Ok. Para la siguiente ya sabemos donde está. Por la noche cada uno a nuestra habita. Saco de dormir sobre el desnudo colchón y a pegar pestañas por primera vez en el continente australiano. Mañana día 1 de curro. Espero que sea soportable.

La alarma me despertó a las 6.30, Inuuuuuuuuuu! Arriba my friend. Leche, cereales, un plátano. Jeans, manga larga, gorra y botas del decathlon. A ver cómo es el concepto farm... A las 7 am un coche paró en la puerta. Denny a los mandos... Let´s go guys! dijo en indiglés.


 Ahí va un adelanto de un momento de la tarde...


AUSTRALIA


SEAWS II

"Proyecta y se realizará. Creo que no somos conscientes de donde nos hemos metido, pero está claro que a partir de ahora todo depende de nosotros. Pensamiento, acción, concreción."


Frío. Frío artificial creado por el aire acondicionado en el avión de Air Asia from Kuala Lumpur destino Melbourne. Semi acostumbrados al nuevo horario y al calor mojado, hicimos noche en el aire cubriendo en 9 horas de vuelo los 6.370 km que separan a las dos urbes. Menos ojos rasgados componían el paisaje interior de la nave y el frío seguía siendo exagerado, venta de mantas a 12€, pantalón corto y camiseta, negocio redondo han conseguido, aunque no con nosotros. Ocupé tres asientos para tumbarme a gusto, ovillado casi tiritando mi manta han sido las revistas del avión, literal. Inu helado y sentado, dormido a ratos. Silencio elevado, sin lloros, ni ronquidos, ni conversaciones, tan sólo el ruido motor y alguna turbulencia. A tres horas del aterrizaje volví a mi asiento, unas pancakes con miel y mantequilla, ricas y esponjosas a la par que escasas, para desayunar. “Joder colega estoy un poco acojonado con la entrada en Australia… Me han comido la cabeza con el programa de explora, el de las fronteras de Sidney y eso”. “No te ralles tío que yo el año pasado entré sin problema”, “Ya Inu pájaro tu tenías visa de estudiante y un curso becado, esto es otro rollo, vamos 2 meses y no tenemos ni hotel, ni contacto ni ná.” En la tarjeta de inmigración pusimos que vamos al 63 de Thierry St, una calle escogida tras ojear el mapa de MEL. Otras 2 partidas de ajedrez y dos nuevas derrotas en mi palmarés. A las 9 am de aquí, 10 horas menos en España aterrizábamos en Melbourne y al poco desmitificaba la frontera del país-continente al no recibir más que amagos de lo que pudo ser una ronda de preguntas de respuesta dubitativa y acabó con los dos en la puerta de Tullamarine (aeropuerto de MEL), decidiendo los pasos a seguir. Noche en Melbourne o nos vamos a Shepparton, localidad sita a 198km de MEL, interior, famosa por sus tierras de cultivo… ¿Objetivo en las Antípodas? Cash. Hacer dinero, ya volveremos aquí para gozarlo. Sin visa de trabajo es complicado y arriesgado trabajar cara al público, además no suelen contratarte. El año pasado, Canas consiguió trabajo en una farm en Shepparton y parece que ahora es la época de recogida. Central Ave, esos son los datos que tenemos. Nada más. 

Hi Sir, ¿Do you know how can we get to Shepparton? *Ask to the driver of that bus. Cheers. *No problem-.
Hi Sir, ¿Do you know how can we get to Shepparton? *Yes, go to the third bus stop and ask the woman who is sat there, she is also heading Shep. Ok, tx man.

Pues sí, Natasha iba a Shepparton y también trabajaba para el Gobierno, en el Ministerio de Defensa. “Quite fun”, decía, joder divertido que te he dicho que vamos a intentar buscar trabajo en Shep y no tenemos visa y tu curras para el Goverment, je. Y aquí no tienen fama de corruptos o despegados respecto de los asuntos del país. Tan sólo 20 minutos después miraba por la ventana del minibús destino Shepparton (46AU$&), compartido con dos granjeros-cowboys de manual (rollo Clint Eastwood sin esa clase) una especie de Geisha cincuentona y muy delicada, Natasha y Jeff, el amable y rechoncho conductor. Un par de miradas al asiento del copiloto y me acostumbré a que era el del piloto, por la derecha como en Inglaterra. Ina descansaba cabeza pegada a la ventana. Devorando millas pensando en como saldría la cosa. De momento gasto y más gasto, quedan unos 1.000€ del presupuesto y en teoría 6 meses por delante… Hay que producir. ¿Al campo? Pagan bien y es duro, desplaza la resistencia de tu límite. Y eso suena bien.

Llegamos a la Railway Station de Shepparton y bajamos todos, pese a que había otra parada posterior. Durante el trip la servicial Natasha nos dejó su Ipad (qué mal rollo no poder decirla que queríamos currar) para chequear disponibilidad de hoteles. Todo ocupado, ¿y eso? *Car event is coming. Perfecto. Mínimo 90€ por room. Hostels completos. Ina, ¿te acuerdas de la de Hendaya, hace 9 años… Cuando no teníamos casa y saltamos la valla de aquella mansión veraniega vacía para sobar en el jardín hasta que nos fuimos a la estación, destino Tolouse? –Sí, fue grande eh.- 
Pues eso.

La prima de Natasha, una rubia alegre y escotada, se ofreció a llevarnos en su cozy car. ¿Y qué os trae por aquí chicos? Ya sabes, queremos conocer la Australia profunda. *You guys are going to love Shepparton, tomorrow night we can hang out together, if you want. Hicimos dos paradas. Supermercado donde recargamos 19 AU$ en la tarjeta wifi del canijo (estuvo aquí el año pasado y le dio a Inu su USB para tener internet) mientras ellas se ponían al día y hacían compra, y McDonalds, dejándonos, después de hacer la mítica broma de nos vamos con vuestras cosas, en la encrucijada de las dos principales calles de Shepparton. ¿Dónde comemos? En ese banco a la sombra. A ver si pillamos curro que en 4 horas en Australia van 200€… Buff, vamos a buscar una farm a ver si nos contratan y dormimos allí del tirón, aunque sea en el suelo. Después de empujar durante unos 100 metros el coche de una australiana a la que le falló el motor pregunté a un sesentañero con cara de sabio:

Hi sir, ¿would you know where is central avenue? *Yes, kind of far from here… ¿Can we go by bus? *hehe, don’t think so, you should take a cab, but it´s going to be expensive… ¿What do you mean by expensive? * At least 25 AU$... Ok, and…(cambiando el tono sin saber por qué) ¿Maybe you know someone who need a worker on his farm? * Well, are you in legal situation? Well, you know, we just got the tourist visa. *I see, difficult guys, mmmm, Joe Vraca, he used to hire people without looking his visa… Joe Vraca, Thank you so much sir, we appreciate it.

Vamos nen a buscar taxi! Inu lo tenía localizado. Una señora desbordada de grasa y dientes tan marrones que no le miras a la cara nos acercaba por 20 pavos. No sabía la que le venía encima. Joder que negatividad y escepticismo desprendía la mujer. ¿No visa? Imposible, totalmente imposible. Que sí mujer, ya verá como conseguimos trabajo hoy mismo. *Hahaha, I don´t think so. ¿? You are going to see so. Hablaba por lo bajo, no se si consigo misma o con nosotros, vamos, vamos, vamos. Hemos invertido el dinero en llegar hasta aquí confiando en conseguir algo, ¡vamos!

En 20 minutos llegamos a central avenue, sin saber una dirección exacta. Fruta, vegetales, parcelacas a ambos lados de la ruta… Ok, let´s try in here. La mujer se desvió y entramos en una de las granjas. 3 casas desvencijadas rodeadas de terreno hasta donde llegaban los ojos. Saltamos del coche y a los tres pasos HI!! Unos gritos… Entreabrió la puerta de una de las desmejoradas casas un pibe de unos 33 años, nervioso por la visita inesperada y cara de haberse fumado más de un canuto. Buscamos trabajo. *No, no hay, no es temporada. Hablaba cerradísimo y con voz grave, la señora del taxi cabeceaba con el internacional gesto de “os lo dije”, mmm, ¿conoces una finca en la que el dueño es un indio? *Yes, Harry, voy a llamarle. Se metió en su choza y salió a los 2 minutos. Volved en enero. Ahora no hay nada. Ni aquí ni en otro lugar cercano. En año nuevo sí.

Gracias.

Nuestras miradas se cruzaron con sentimientos encontrados. Qué cagada. No es temporada. ¿Y ahora? En Queensland hay curro seguro, dijo Inu. El tema es que está a más de 1.500km. Pues vamos. Sin trabajo no hay posibilidades.